
Existen dos técnicas para cocinar a baja temperatura, una emplea ollas de cocción lenta o incluso hornos. La otra es la cocina al vacío a baja temperatura, o más conocida como sous-vide (del francés al vacío). Las dos consisten en cocinar los productos a una temperatura inferior a la de ebullición del agua durante largos períodos de tiempo. Las ventajas de estas técnicas es que no se produce la evaporación del líquido que contiene el alimento, lo que potencian su sabor.
Al contrario de lo que puede parecer, cocinar a baja temperatura es muy sencillo, nutritivo, económico y lo mejor de todo muy sabroso, siempre que se respeten los tiempos de cocción de los alimentos.
Para que esta técnica sea segura, el tiempo de cocinado y la temperatura deben ser estrictamente seleccionado para evitar que crezca una bacteria que puede hacerlo en ausencia de oxigeno.
Cocinar a baja temperatura con ollas de cocción lenta
Cocinar en este tipo de electrodoméstico no se diferencia de como cocinamos normalmente, salvo por el tiempo de cocción que depende del alimento. Estas ollas de cocción lenta, poseen una tapa para evitar la perdida de líquido, ya que se condensa en la tapa y regresa al alimento. Por lo general tan solo poseen dos o tres niveles de intensidad, aunque existen modelos que puedes controlar la temperatura exacta
Cocinar a baja temperatura al vacío Sous-Vide
La técnica de cocción sous vide, consiste en envasar al vacío los alimentos, generalmente con una salsa que le aporte líquido y sabor a la hora de la cocción, en una bolsa de vacío especifica para alimentos. Luego la bolsa se introduce en agua a una temperatura inferior al punto de ebullición del agua.
Por lo tanto, para poder cocinar al sous-vide es necesario una envasadora al vacío, bolsas de vacío y un roner, que no es más que un electrodoméstico que calienta el agua y la hace circular para igualar la temperatura del agua en todo el recipiente.